martes, 22 de febrero de 2011


La décima es
un árbol de febrero


(Dedicada a la XX Feria
Internacional del Lib
ro,
al XI Premio Ala Décima y al amor)


Desde Santa Clara, ciudad capital de la provincia de Villa Clara, nos informa de la cita del segundo mes del año de su tertulia
La décima es un árbol quien la fundó en septiembre del 2007 y la dirige desde entonces: Mariana Enriqueta Pérez Pérez, poetisa, investigadora, creadora
del sitio web de ese espacio, miembro del Grupo Ala Décima y su representante en ese territorio.

Fundadores de la tertulia La décima es un árbol en septiembre del 2007. La sexta de izquierda a derecha es Caridad González Sánchez, La Abuela.


LA D
ÉCIMA ES UN ÁRBOL DE FEBRERO

Por Mariana Enriqueta Pérez Pérez

La tarde del pasado viernes (18 de febrero) –fresca y con algo de sol– permitió una tertulia dinámica, sin momentos grandilocuentes, pero sí con la expectativa de escuchar a los tres poetas villaclareños distinguidos en el XI concurso nacional Ala Décima: Caridad González Sánchez «La Abuela» (Primer Premio), Olimpia Pombal Duarte (Premio especial «Ada Elba Pérez») y Edelmis Anoceto Vega (Mención).

Un nuevo amigo, José Arias Díaz, vino desde Ciego de Ávila para asistir al encuentro; nos conoció a través de los sitios digitales Cuba Ala Décima y La décima es un árbol. Afirma estar iniciándose en estos quehaceres octosilábicos, aunque ya ha publicado algunas décimas en los diálogos poéticos internacionales. Otras personas asistieron también por vez primera.

Y como Eros (Cupido) era un «invitado» especial, se le dedicaron varios momentos; en el primero, las décimas –tomadas de una convocatoria de Ramón Espino– de siete poetas iberoamericanos, con el pie forzado «Un potro sobre tu boca». Después, unas mías que piden versos prestados a todos ellos:


«UN POTRO SOBRE TU BOCA»

Con siete poetas iberoamericanos


Sobre este mar para misa
el aire esfuma los ruidos,
se cuela por mis sentidos
la calma de una sonrisa.
Desabrocho tu camisa

y es tu cuerpo una pradera.
Ya perdoné tu manera
de agraviarme; ya no temo:

al mar sosiega tu remo
y eres potro en mi galera.


Conquistar ese fortín
con tu garfio de pirata,

encender una fogata,
ser gozoso paladín;
pensar que tienes –por fin–
la pasión que se recrea
con mis ansias; la presea
germinal de nuestras bocas,
beso joven, que no evocas:
desde tus ojos flamea.


Sueño con un horizonte
sin niebla, con cervatillos,

con guitarras –no cuchillos–
con versos de Anacreonte;
sin disparos en el monte,

con palabras, con la risa,
con Apolo y Artemisa,
–no peligrosas leyendas–
y que desnuda me tiendas
sobre este mar para misa.


Galopea el pensamiento
–corcel que inventa mi ocaso–,

cuando presiente el abrazo
corre goloso y contento.
Cabalgamos por el viento
y la brida se desboca.
Bajo las nubes invoca
la luz: mi espuela reluce
como labios y conduce
un potro sobre tu boca.


Imagen: Pintura S/T de Adela Mª Suárez, cortesía de la autora para la tertulia.


Otros poetas del público tuvieron oportunidad de leer o declamar sus textos, como Liany Vento, Víctor Castillo y, naturalmente, José (Pepe) Arias.

También se presentó «La pieza del mes», no así el Catálogo rimado Nº 40, por «razones ajenas a nuestra voluntad» –como acostumbran a justificar los informes. En marzo nos pondremos al día nuevamente.

Ocurrieron dos sucesos: el primero –casi trágico– fue un accidente eléctrico, en la salita donde nos hallábamos, que puso a correr a la Directora del Museo; el segundo, curioso, la décima que escribieron Liany Vento y Edelmis Anoceto para evaluar la tertulia (PNI):


Positivo: es el café.
Lo negativo: es el sol.
Interesante: es el rol

de la décima, la fe.
Presente El Cucalambé:
cuando Mariana lo evoca
el dolor aquí revoca.
En el verso se engalana
cuando cabalga Mariana
«un potro sobre su boca».


Y así (por suerte sin incendio) pudimos terminar el encuentro de febrero, en espera de la Feria del Libro y con mucho amor. Omito las opiniones del público para
que no me acusen de pedante.




M
uestras de la obra poética de Mariana Enriqueta Pérez Pérez, pueden verse mediante los siguientes enlaces con el blog Álbum nocturno y la antología on line Arte poética. Rostros y versos, ambos del poeta salvadoreño
André Cruchaga. Varios estudios realizados por ella aparecen en nuestra sección Decimacontexto: POLIZÓN EN LA ALJABA DE EROS, sobre la décima de amor escrita en Villa Clara. LAS ALBAS RUMOROSAS, acerca del libro Jiras guajiras, de Samuel Feijóo. LA DÉCIMA CUBANA DURANTE LAS GUERRAS DE INDEPENDENCIA: LOS POETAS DE LA GUERRA, interesante aporte sobre ese período. LA DÉCIMA ESCRITA EN VILLA CLARA, sobre la poesía
concebida en estrofas de diez versos en esa provincia.


Visite el sitio web de la tertulia La décima es un árbol, ya con actualizaciones (aunque no todas, nos aclara Mariana) y una nueva sección: Debate.




sábado, 19 de febrero de 2011

XX Feria Internacional del Libro


De Carlos Tamayo, nuevos
libros sobre El Cucalambé


NUEVO LIBRO SOBRE EL CUCALAMBÉ


Por José Armando Fernández
Condensado de CubaLiteraria

Una de las etapas más polémicas de la vida de El Cucalambé, es abordada en el libro En Santiago y otras fuentes (Editorial Sanlope), de Carlos Tamayo, uno de los investigadores que más se ha acercado a este célebre escritor cubano.

A través de artículos, entrevistas y ensayos, el autor recrea los últimos años de vida de Juan Cristóbal Nápoles Fajardo, el mayor poeta bucólico cubano del siglo XIX, que desapareció en Santiago de Cuba misteriosamente en 1861 a la edad de 32 años.

Tamayo explicó a la AIN (Agencia de Información Nacional) que «existen múltiples versiones y conjeturas sobre las posibles causas de este hecho, pero ninguna es concluyente», y ese misterio acompaña la obra de este personaje dando lugar a uno de los mitos más relevantes en la historia de la Isla.

Nápoles Fajardo es uno de los más importantes representantes del movimiento literario conocido como siboneyismo, surgido en la primera mitad del siglo XIX y que convirtió a la décima y la extinta cultura aborigen, en símbolos del naciente sentimiento de cubanía.

(...)

Tamayo, Premio Provincial de Investigación Sociocultural 2010, publicó también Epítome a las poesías completas del Cucalambé, antología que recoge alrededor de 100 obras del bardo tunero hasta entonces inéditas, y que serán reeditadas por Letras Cubanas próximamente.

El también presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba, en Las Tunas, alertó sobre la posibilidad de que aparezcan otras obras de Nápoles Fajardo, extraviadas en archivos institucionales o privados esperando a ser descubiertas.

Tomado de www.tvcamaguey.co.cu

Versión original en CubaLiteraria


CON CARLOS
TAMAYO Y SUS FUENTES

Por
Gretel Yanet Tamayo Velásquez
Tomado de Tiempo21

De carácter sencillo y muy pausado al hablar, como si cada palabra que dijera tuviera una profunda carga de simbolismo. Intenso amante de la historia de su tierra y especialista en la vida y obra de Juan Cristóbal Nápoles Fajardo, El Cucalambé, catalogado como el poeta bucólico más importante del siglo XIX cubano.

Este escritor de la oriental provincia de Las Tunas se caracteriza por su flamante espíritu y sacrificio para trabajar. Y es que a 25 años de la publicación de su primer libro, Carlos Tamayo Rodríguez, quien además es el presidente de la Unión de Escritores y Artistas de Cuba (UNEAC), en el territorio, vuelve a la Feria del Libro con dos nuevas propuestas para los lectores cubanos: En Santiago y otras fuentes y Vuelvo la lira a pulsar. Sobre estos últimos textos que ha escrito comenta para Tiempo21.

En Santiago y otras fuentes es una compilación de ensayos publicados en la revista Santiago de la Universidad de Oriente, en el que también aparece el diario de Mercedes Varona, heroína de Las Tunas y es importante que las tuneras lo lean para que conozcan del sacrificio de las mujeres cubanas en las guerras de independencia. Contiene además, cartas del patriota cubano Pedro Santa Silia y una entrevista al escritor de Santiago de Cuba, José Soler Puig.

“La segunda parte consta de una polémica sostenida con Jesús Orta Ruiz, el Indio Naborí y mía sobre aspectos de la vida de El Cucalambé. Aquí se incluyen cartas, entrevistas y otros documentos de este hecho.”

Vuelvo la lira a pulsar, de la editorial Letras Cubanas, es fruto de una compilación de poemas de Juan Cristóbal Nápoles Fajardo publicados en Epítome a las poesías completas del Cucalambé.

“La importancia de este libro es que contiene más poemas que no están en las Poesías Completas y por primera vez circula nacionalmente un texto con escritos de El Cucalambé en prosa. La mayoría de los lectores conocen a El Cucalambé poeta y ahora podrán leer sus prosas. Y contiene por otra parte cinco ensayos de sobre la vida y obra del poeta.

“Solo espero que los libros tengan buena aceptación por parte de los lectores tuneros y de toda la isla”.

Carlos Tamayo Rodríguez cuenta con más de 15 títulos publicados, entre ellos: Miedo a Vicente García, Acerca de la vida y obra de El Cucalambé, Volver a tomar la palabra y Epítome a las poesías completas del Cucalambé. Para regocijo de los tuneros Carlos llegó y sin dudas para quedarse. Ojalá y todos los años nos siga entregando sus letras que rehacen la historia.

Versión original en Tiempo21


En nuestros archivos:
Carlos Tamayo cumple años con el Cucalambé



sábado, 12 de febrero de 2011


Del surrealismo
a la décima exquisita


Prólogo al libro de ese título
(Editorial Sanlope, 2010), por
su antologador, el poeta y
profesor de literatura oral
Argel Fernández Granado
Fotos: Samuel Perdomo








En algún
momento de la tercera década del siglo veinte, los seguidores del surrealismo (1), imbuidos en su afán de explorar las misteriosas posibilidades del subconsciente más allá de la razón, crearon ese extraordinario divertimento conocido como cadáver exquisito, consistente en escribir un poema entre todos los participantes en sus tertulias, con la peculiaridad de que ninguno de ellos podía ver lo escrito por el poeta que le antecedió. De esta manera se conformaban al azar, verso a verso, composiciones poéticas que, a pesar de la diferencia de voces y el aparente caos surrealista, llevaban en sí la fuerza expresiva de sus autores.

Ellos jugaron con su exquisito cadáver, al menos durante dos décadas, pero su juego continuó atrapando a otros hasta la actualidad. Sin dudas, este ejercicio intelectual resulta atractivo y, por lo visto, el “cadáver” jamás será sepultado en el olvido. En septiembre del año 2000, en Pilón, poblado de la provincia de Granma, di mi verso, junto a otros participantes en el encuentro de poetas Al sur está la poesía (2), a un poema colectivo que seguía las reglas del juego surrealista y para mi sorpresa, resultó un extenso, robusto, brillante y metafórico canto a la poiesis.

A finales de ese mes, todavía impresionado con el fruto de aquel juego, les propuse a mis colegas de la Casa Iberoamericana de la Décima El Cucalambé, que entonces radicaba en la Dirección Provincial de Cultura de Las Tunas, llevar a nuestro Café con Verso (3) algo parecido. Así lo hicimos, pasamos por el público una hoja doblada como acordeón en diez partes para que el mismo número de presentes escribiera un verso cada uno en honor de Jesús Orta Ruiz. Lo hicieron gustosamente y el resultado fue una estrofa libre de métrica y rima muy lejana de la espinela tradicional.

Ya en octubre del mismo año, se les pidió a los poetas escribir, con el adiós como tema, una décima colectiva, al fin y al cabo, la espinela debe protagonizar nuestras actividades. A partir de ese momento, convertido en sección insoslayable de nuestras noches de café y verso, el antiguo “cadáver” del surrealismo fue rebautizado como décima exquisita y asimilado en su nueva forma por los asiduos a nuestro patio. Sin embargo, de su “padre” no sólo conserva el ser escrito por muchos; aunque las exigencias formales de una estrofa rígida como la espinela le han impuesto otros retos; es innegable que heredó la exquisitez en el lenguaje, la claridad de las imágenes poéticas, y esa mezcla de inspiración y oficio que es la verdadera poesía.

Quienes conocen la escritura de la décima, desde la más tradicional hasta la más vanguardista (y sobre todo ésta, con sus deconstrucciones cuasi del versolibrismo, sus encabalgamientos y su, a veces molesta, irreverencia frente a la tradición), saben que es una estrofa muy compleja, que a semejanza con el cuento breve, debe cumplir ciertas reglas, como síntesis, cohesión y coherencia, que la hacen funcional y efectiva en su objetivo de dar a la luz sentimientos, ideas y hechos; saben que no en vano el poeta Adolfo Martí Fuentes la llamó cárcel de aire puro ; saben que se necesita concentración y conocimiento y por supuesto, saben lo difícil que resulta encauzar las ideas de diez cerebros distintos, encontrar la palabras precisas, hilvanar diez versos octosilábicos que vayan, como una flecha única, a dar en el centro de la diana.

Durante todos estos años he propiciado, conducido y cultivado la décima exquisita en el Café con Verso y desde esa posición privilegiada que me da la experiencia, aseguro que resulta por lo menos sorprendente que hayan sido escritas décimas de magnífica factura, sólidas composiciones, perfectas en lo formal y en lo semántico, algunas hasta “redondas”, como habría dicho Gilberto E. Rodríguez, de haberlas conocido, que pueden ser leídas también del décimo verso al primero sin perder su significado, ni el sentido lógico de su mensaje, “reversibles”, diría yo. Y digo esto teniendo en cuenta que los versos que componen estas décimas no han sido escritos exclusivamente por poetas reconocidos; los lectores hallarán en esta compilación a escritores como Pablo Armando Fernández, Carlos Esquivel Guerra, Pedro Péglez, César López, Waldo González, Antonio Borrego, Antonio Gutiérrez, Alberto Garrido, David Mitrani, Juan Carlos García Guridi, Carlos Téllez, Ana Rosa Díaz, Odalys Leyva, Lesbia de la Fe, Frank Castell, Jorge Luis Peña, Ronel González, Alejandro Aguilar, Reinaldo García Blanco, Lucy Maestre, Ramiro Duarte, María Liliana Celorrio, Diusmel Machado, Frank Upierre, Sergio Morales, Rafael Vilches, Adalberto Hechavarría, Daniel Laguna, Modesto Caballero, Ana Pérez Batista, Reyna Esperanza Cruz, Jesús David Curbelo, José Manuel Espino, Juan Manuel Herrera, Carlos Zamora, Irelia Pérez, Alexander Besú y muchos más, a destacados repentistas como Gabriel Llanes Estrada, Nelson Lima Chaviano, Emiliano Sardiñas Copello, Luis Martín, Raúl Herrera, Argelio Torres García y José Manuel Silverio, junto a otros nombres menos conocidos; y lo que es más notable aún, junto a personas de las profesiones más disímiles: dirigentes, oficinistas, periodistas, obreros, campesinos, artistas de otras manifestaciones y hasta visitantes extranjeros como el mexicano Nicolás García Flores y el chileno Nelson Álvarez, El Canela. Por supuesto que el Café con Verso ha tenido colaboradores incondicionales que han dado su aporte invaluable a la décima exquisita y no pueden dejar de mencionarse cuando se hable de este acontecimiento, ellos son las poetisas Ondina Gamboa y Yuslenis Molina y el poeta Edilberto Rivera.

He seleccionado estas décimas con criterios de calidad escritural y diversidad temática, con la intención de ofrecerte, lector, un producto ameno, que muestre las posibilidades expresivas de nuestra estrofa de diez versos y a la vez te sorprenda con su originalidad.

En Las Tunas, tierra de El Cucalambé, la décima espinela es cotidiana, tan común que a veces la dejamos pasar a nuestro lado sin darle importancia. Esta noble estrofa ha sobrevivido los embates del tiempo adaptándose a las nuevas corrientes y ha soportado los ataques de sus detractores que la consideran un género menor de las letras hispanas, sin embargo, como auténtica voz de pueblo, ella siempre tiene algo nuevo para dar. Nuestra exquisita décima no es un cadáver, de su excelente salud hablan estos versos; y si aún no has escrito tu primer octosílabo, escucha a Renael González Batista cuando dice:


De tu décima disponte
a hacer un arma sonora
y a la opinión agresora
con sus diez balas oponte.
Aunque haya quien no remonte
la altura de sus laúdes
y en arcaicos ataúdes

la quisieran enterrar,
con ella, voz popular,
prefiero las multitudes. (4)


Las Tunas, 8 de junio de 2009
A.F.G.



1.- Surrealismo: Movimiento artístico y literario surgido durante la segunda década del siglo XX, que defendía la renovación de los valores morales, científicos y culturales mediante la exaltación de la vida profunda del subconsciente, más allá de la razón.

2.- Al sur está la poesía: Encuentro anual de poetas organizado por el grupo literario SUR, en el municipio de Pilón, Granma.

3.- Café con Verso: Actividad artística y literaria organizada por la Casa Iberoamericana de la Décima Juan Cristóbal Nápoles Fajardo “El Cucalambé”, que se realiza cada cuarto miércoles.

4.- Renael González Batista: “Prefiero las multitudes” (Fragmento), en Piel de polvo. Editorial Oriente, Santiago de Cuba, 1988, p. 22.


Argel Fernández Granado es miembro del Grupo Ala Décima y coordinador de su filial en Las Tunas.