Siempre con la población
Se
realizó del 13 al 15 de diciembre, con un amplio programa de lecturas poéticas,
sesiones teóricas, intercambios con la comunidad, y la premiación del VIII
concurso Décima al filo, cuyo Gran Premio mereció Mariana
Pérez Pérez
Varias participantes en el X Encuentro Décima al filo, tras una
lectura colectiva de poesía en el Museo de la Constitución.
Ampliado
de Trabajadores
Fotos:
Cortesía de Odalys
Leyva
La
camagüeyana ciudad de Guáimaro, cuna en 1869 de la primera constitución cubana, fue
testigo una vez más este diciembre de una cita artístico-literaria de amplio
intercambio con la comunidad: el X
Encuentro Décima al filo, organizado por la
agrupación homónima de mujeres decimistas, que dirige la poetisa Odalys
Leyva Rosabal, y respaldado entusiastamente por sus padres y vecinos, las
instituciones culturales del territorio y el Frente
de Afirmación
Hispanista, de México.
La
velada final, que culminó tres días de agenda, se efectuó en la casa de familia
de René Lantigua, veterano colaborador de estos eventos, y contó con la
asistencia de numerosos pobladores, además de la treintena de escritores y
artistas participantes, procedentes de varias provincias y de la propia villa
anfitriona, así como de integrantes del colectivo de Radio Guáimaro.
Esa
emisora había trasmitido, en la sesión nocturna de apertura, su programa Buenas
noches, Guáimaro, ante el portal de la vivienda de Odalys,
convertida desde hace años en el Rincón
guaimareño de la décima. Se dio
inicio así a una secuencia de cálidas ocasiones para el disfrute de la poesía
escrita en décimas, acompañada por la música de concierto y las tonadas
campesinas, y también por la canción trovadoresca.
Los Premios Cucalambé también leyeron sus obras y recorrieron el
Museo. De izquierda a derecha, Agustín
Serrano, Alexander
Besú, Irelia
Pérez Morales, Odalys
Leyva, Carlos
Esquivel, Ronel
González y Pedro
Péglez González. Otros escritores que ostentan ese lauro y participaron del
evento, aunque no se encontraban en el momento de la foto, fueron Miguel
Mariano Piñero, Diusmel
Machado y Junior
Fernández Guerra.
En
el Museo
de la Constitución tuvo lugar el
espacio teórico, en el cual se expusieron diez ponencias, todas relacionadas
con el complejo artístico-literario de la décima, con sus columnas centrales de
la oralidad y la escritura, y sus vasos comunicantes con otros exponentes como
las artes plásticas. La Casa de la Cultura de la ciudad acogió
igualmente los momentos de este X
Encuentro Décima al filo, dedicado a dos escritores merecedores del Premio
Iberoamericano Cucalambé, el más importante de las letras decimísticas: Irelia
Pérez Morales (Cienfuegos) y Alexander
Besú Guevara (Granma), a la escritora guaimareña Nitza Núñez, y al Aniversario
22 de la Casa Iberoamericana de la Décima El Cucalambé, con sede en la
ciudad de Las Tunas.
Otros
ocho bardos merecedores del Premio Cucalambé tomaron parte de la cita y sus lecturas
poéticas. Es la primera ocasión en que el cónclave cuenta con tantos escritores
que ostentan el alto galardón.
En el encuentro de clausura, en la casa de René Lantigua, se dio a
conocer el acta del jurado del VIII
concurso iberoamericano Décima al filo, el cual estuvo integrado por Miguel
Mariano Piñero, Marcelo
Leal y Pedro
Péglez González.
En
el contexto de la velada final, se efectuó la premiación del VIII
concurso iberoamericano Décima al filo, certamen dedicado
especializadamente a la estrofa escrita por mujeres. Su Gran Premio fue a manos
de la villaclareña Mariana
Pérez Pérez, por su obra Entre la
playa y el cielo, al decir del jurado por los altos valores literarios del
conjunto y el adecuado tratamiento artístico de un tema neurálgico de la
contemporaneidad.
Conquistaron
galardones colaterales:
— Premio
del Grupo Nacional de Escritores Rurales, que incluye invitación a integrarse a
esa agrupación, a Irelia
Pérez Morales, por su obra Yo, la
llave.
—
Premio Perros ladrándole a Dios, que otorga el escritor Carlos Esquivel, a Luisa
Oneida Landín (La Habana), por su obra Pan
nuestro de lo inasible.
— Premio
Más allá del silencio, a escritora residente en el exterior, para Martha
Rosa Fernández, por su obra Las malditas diferentes.
— Premio
Décima fiebre, de tema erótico, otorgado por la Casa Iberoamericana de la
Décima El Cucalambé, de Las Tunas, para Ada Bezos Hernández (cubana residente
en el exterior) por su obra Íntimos
misterios.
— Premio
del Grupo Toda luz y toda mía, de Sancti Spíritus, a Olimpia
Pombal Duarte (Villa Clara), por su obra En el Parnaso.
— Premio
del Grupo Ala Décima, para autora joven, a Mayelín Barrera Castro (Las Tunas), por
su obra Poema en carne viva.
— Premio del Proyecto La
ceiba en flor, de Velasco, Holguín, a Elvia Rodríguez Carballo (Sancti Spíritus), por su obra La décima guajira.
Elizabeth
Reinosa Aliaga (a la izquierda), que en la pasada edición del certamen
conquistó al mismo tiempo el Gran Premio y el Premio del Grupo Ala Décima,
entrega este último lauro a Mayelín Barrera, que lo mereció en esta
convocatoria. Detrás, Odalys
Leyva con otros regalos.
El
XI Encuentro Décima al filo será en diciembre del 2016 en esta ciudad y estará
dedicado a René Lantigua y su familia de fraternos colaboradores, así como a
los escritores María
de las Nieves Morales y José
Luis Serrano, Premios Cucalambé en el 2002 y 2001 respectivamente.
Versión original en
Trabajadores digital:
X Encuentro Décima al filo, siempre con la población.
X Encuentro Décima al filo, siempre con la población.
MIEMBROS
DEL GRUPO ALA DÉCIMA PRESENTES
EN EL X ENCUENTRO DÉCIMA AL FILO:
EN EL X ENCUENTRO DÉCIMA AL FILO:
Odalys
Leyva, Irelia
Pérez Morales, Alexander
Besú Guevara, Carlos
Esquivel, Agustín
Serrano, Miguel
Mariano Piñero y Pedro
Péglez González.
LA
GANADORA DEL GRAN PREMIO
Mariana
Enriqueta Pérez Pérez (Santa Clara, Villa Clara, 1951), Licenciada en
Filología, en la especialidad Lengua y Literatura Hispanoamericana y Cubana, y
Diplomada en Cultura Cubana. Cuenta
con numerosos reconocimientos, tanto en versos como en trabajos de
investigación. Entre sus lauros está el Premio
Poesía de Amor Varadero 2009. En el 2013, en el concurso
internacional de poesía Nósside, obtuvo una mención particular, y su
poema en décimas Multiverso
alcanzó mención
en el apartado de poesía del V
Concurso de Ciencia-Ficción y Fantasía Oscar Hurtado. Tiene
publicados, entre otros, los libros La nostalgia domina los rincones (poesía,
Editorial Capiro, 1992); Cierta llama (décimas, Ed. Capiro, 2001); La
desnudez oculta (poesía, Ed. Capiro, 2005); Búscame en el horizonte (compilación de la obra poética de Leoncio
Yanes, Ed. Sed de belleza, 2008), y La
flecha inesperada (poesía, Editorial Capiro, 2012). Es representante
del Grupo Ala Décima en la provincia de Villa Clara, donde fundó y dirige la
tertulia La décima es un árbol y su
sitio web. En el séptimo aniversario de esa tertulia (2014), su poema Un
cante de ida y vuelta (guajira) mereció el primer premio en el concurso
«Leoncio Yanes. Catálogo rimado:
décimas del año», que se decide por votación de los contertulios.
También en el 2014, mereció el Premio
del VI concurso nacional de glosas Indio Naborí, con su poema Embriaguez
(rosa, espada, luz). En nuestros archivos, de este 2015, su poema Los ojos de
la voz, dedicado al deceso de Eloína Pérez,
compañera de toda la vida del Indio Naborí.
A
continuación su poema Entre la playa y el
cielo, que mereció el Gran Premio en el VIII
concurso iberoamericano Décima al filo. El conjunto está dedicado a Aylan
Kurdi, niño sirio, de tres años, encontrado muerto en una playa de Turquía, y
forma parte de una obra más amplia.
ENTRE
LA PLAYA
Y EL CIELO
Y EL CIELO
(Muertos
del Mediterráneo)
(Fragmento)
Desde Joan Manuel Serrat
1.
Quizá porque mi niñez
fue nube de un soplo austero
me convertí en marinero
de tus rumbos a través.
fue nube de un soplo austero
me convertí en marinero
de tus rumbos a través.
Argonauta
de hosca tez
bajo
sol desprotegida,
me desplazo en estampida
que pierde el viaje y la meta.
me desplazo en estampida
que pierde el viaje y la meta.
Mi
azul, mi acuoso planeta
se abre y se hunde, sin vida.
se abre y se hunde, sin vida.
2.
Sigue jugando en tu playa,
mar,
no me lleves al fondo.
No repudies a quien blondo
no ha nacido, a quien desmaya
por encontrar su atalaya,
No repudies a quien blondo
no ha nacido, a quien desmaya
por encontrar su atalaya,
cuna
del niño sin fiambre.
No
repudies al enjambre
que se guarece en tus puertos.
que se guarece en tus puertos.
No
azotes, mar, que los muertos
cortan de vida el estambre.
cortan de vida el estambre.
3.
Escondido tras las cañas
aúlla
un viento azaroso.
¿Quién causa tanto destrozo?
¿Quién dio fuego a las cabañas
de mi aldea, como «hazañas»?
¿Qué soldado furibundo?
¿Quién causa tanto destrozo?
¿Quién dio fuego a las cabañas
de mi aldea, como «hazañas»?
¿Qué soldado furibundo?
Hay
un terror nauseabundo,
un
crimen de lesa vida,
y en esta chalupa hundida
y en esta chalupa hundida
pierde
a sus hijos el mundo.
4.
Duerme mi primer amor
en el cenit de mi cráneo
en el cenit de mi cráneo
y
tú, Mar Mediterráneo,
lo deshojas, vengador.
lo deshojas, vengador.
Yo
era un río acusador
derramado a tus orillas,
ahora doblo las rodillas
en la duna cenicienta
y cae mi bolsa, mi cruenta
soledad, como cuchillas.
derramado a tus orillas,
ahora doblo las rodillas
en la duna cenicienta
y cae mi bolsa, mi cruenta
soledad, como cuchillas.
5.
Llevo tu luz y tu olor
en mi cuerpo desollado.
No pienses que me he callado,
en mi cuerpo desollado.
No pienses que me he callado,
gritaré,
si el resplandor
me ciega. Soy tu deudor,
me ciega. Soy tu deudor,
Mare nostrum. Mar estigio,
dame un piadoso vestigio
familiar, como si el Arca
de Noé fuera mi barca,
sin criaturas en litigio.
dame un piadoso vestigio
familiar, como si el Arca
de Noé fuera mi barca,
sin criaturas en litigio.
6.
Por donde quiera que vaya
arrastraré la furiosa
arrastraré la furiosa
raíz
de tierra infructuosa
que cruje bajo la raya
del muro. ¿Cuál azagaya
penetró en mi piel oscura?
¿Qué brutal magulladura
deja en mi cuerpo, invisible,
este absurdo predecible
y este morir de aventura?
que cruje bajo la raya
del muro. ¿Cuál azagaya
penetró en mi piel oscura?
¿Qué brutal magulladura
deja en mi cuerpo, invisible,
este absurdo predecible
y este morir de aventura?
7.
Amontonado en tu arena
con
jirones del naufragio
se reclinó mi presagio,
perdida el alma y la cena.
Yo imaginé la serena
ley de un país generoso
y me recibe el acoso,
cada sitio me rechaza.
se reclinó mi presagio,
perdida el alma y la cena.
Yo imaginé la serena
ley de un país generoso
y me recibe el acoso,
cada sitio me rechaza.
¿En
cuál suelo está mi casa?
¿Dónde encontrar mi reposo?
¿Dónde encontrar mi reposo?
8.
Tengo amor, juegos y pena,
que
reclaman ilusiones.
Me refugio en estaciones
Me refugio en estaciones
y
son mis huesos la trena
opresora.
El cielo truena:
una
Europa indiferente
ve cómo sufre la gente
(que protección le suplica)
ve cómo sufre la gente
(que protección le suplica)
y
en fronteras multiplica
su
alambrada hacia el Oriente.
9.
En la piel tengo el sabor
de
pasiones y desierto,
es la epidermis del muerto
con purulencia y hedor.
es la epidermis del muerto
con purulencia y hedor.
Hay
un orden violador
sobre la tierra del vivo.
sobre la tierra del vivo.
Riesgoso
mar, vengativo
me envuelves, como sudario,
como túnel cinerario,
como fondo represivo.
me envuelves, como sudario,
como túnel cinerario,
como fondo represivo.
10.
Amargo, del llanto eterno,
uno
mi voz al empuje
de
esa multitud que ruge
a las puertas del infierno.
a las puertas del infierno.
No
hay llanto como el interno
rencor.
Yo grito al vaivén
de
gendarmes y al andén
donde me niegan cobijos.
donde me niegan cobijos.
Grito
a la par de mis hijos:
«¿Por qué nadie sube al tren?»
«¿Por qué nadie sube al tren?»
11.
Que han vertido en ti cien
pueblos
sus
cadáveres. Que en tanto
extravío, muerte y llanto
ahora te ciñen despueblos.
extravío, muerte y llanto
ahora te ciñen despueblos.
Que
al norte invaden los pueblos
(no van sumisos, palpitan).
(no van sumisos, palpitan).
Que
de pie, con hambre, habitan
junto a la muerte en sus botes.
junto a la muerte en sus botes.
Que
los antiguos galeotes
en cien pueblos resucitan.
en cien pueblos resucitan.
12.
De Algeciras a Estambul
la
Historia disipa eras
y cuando zurce banderas
y cuando zurce banderas
cambia
rojo por azul.
Mediterráneo,
la cul-
pa la tiene el Cielo: hitos,
bulas, Cruzadas y mitos…
pa la tiene el Cielo: hitos,
bulas, Cruzadas y mitos…
la
Historia cambia su mapa.
La gente corre y empapa
tu cintura de proscritos.
La gente corre y empapa
tu cintura de proscritos.
13.
Para que pintes de azul
la
luna en los belvederes
se reúnen las mujeres
bajo un añoso abedul.
Sueñan campos de garzul
maduro en calientes panes,
y al cuadro asoman: desmanes
—con óleo espeso y escalas
de gris—, pájaros sin alas,
se reúnen las mujeres
bajo un añoso abedul.
Sueñan campos de garzul
maduro en calientes panes,
y al cuadro asoman: desmanes
—con óleo espeso y escalas
de gris—, pájaros sin alas,
bombarderos
y volcanes.
[…]
15.
Y a fuerza de desventura
se
extravía mi potencia
y cuando ruego clemencia
me rasgo la vestidura.
y cuando ruego clemencia
me rasgo la vestidura.
Bajo
aguas, la tortura,
el humo y el terremoto;
mis amigos en la foto
del iPhone, la red, la moda
el humo y el terremoto;
mis amigos en la foto
del iPhone, la red, la moda
(marcas
y boutique). La poda
y el madero. Ya no floto.
y el madero. Ya no floto.
[…]
COLOFÓN
Como
se abre un postigo
se abrió el bote; al mar abrían
los rayos que me decían
«emigrante» y «enemigo».
se abrió el bote; al mar abrían
los rayos que me decían
«emigrante» y «enemigo».
Y
fue quizás el castigo
de un Zeus contemporáneo
este morir instantáneo,
esta avalancha salobre.
Yo venía del Sur pobre:
de un Zeus contemporáneo
este morir instantáneo,
esta avalancha salobre.
Yo venía del Sur pobre:
morí
en el Mediterráneo.
ANTERIORES
ENCUENTROS DÉCIMA AL FILO:
No hay comentarios:
Publicar un comentario