martes, 31 de julio de 2012

Desde Pinar del Río

Un rincón del verano
Renito, Anabeiby y Juanito.



Por Lorenzo Suárez Crespo
Fotos cortesía del autor
 


Mientras en las calles de la ciudad, aunque no con la vistosidad de otros tiempos, algunas carrozas desfilaban y se escuchaban a su paso los ritmos de tambores y el desfile de las comparsas, hubo un sitio algo apartado donde todavía permanece el más añejo de los jubileos criollos, el punto cubano en las cuerdas de guitarra, laúd y tres dando inspiración a las voces de los poetas repentistas.

Durante los cuatro días de las ahora llamadas Fiestas Populares, la Casa de la Décima Celestino García se erigió,  desde el 19 al 22 de julio a partir de las dos de la tarde en Parnaso de los devotos admiradores de la música campesina y el verso improvisado.

Las cuatro jornadas vespertinas entre música, cuerdas y versos, aguardaron interesantes propuestas. Lo más importante es que los lugareños pudieron ver en su ranchón a poetas ya consagrados de la talla de Renito Fuentes Cintado, Geovany León, Maira Lapido y Felipe Pérez Alvarado, profesionales de la radio y la televisión que accedieron gustosos a nuestra invitación.

Cada espacio fue matizado por la música del Grupo Sabor a Cuba quienes por demás acompañaron las lides de repentismo. Si bien los pies forzados, controversias  y tonadas dieron brillo al espectáculo no hay dudas de que el diálogo poético escenificado por Renito Fuentes y la pequeña improvisadora Anabeiby Rodríguez, de diez años, fue radiante, un encuentro versal  entre las voces del patriarca y su heredera en los vuelos del punto cubano como expresión de identidad. Una de las malaras de Renito voló a los rizos del guano para perpetuar sus huellas en el Ranchón.


No intento a Pinar del Río
llevarme oculto en el pecho,
Pinar del Río, de hecho,
es eternamente mío.
Me da la palma, el bohío,
el laúd, la guayabera,
el aire, la primavera
y diez o doce jabucos
adornados con bejucos
verdes de la cordillera.


Momento sumamente emotivo fue la entrega del Mapa de Artemisa en una obra de artesanía que nos confiriera el poeta y presidente de
la UNEAC de esa provincia Renito Fuentes y que recibiera el director del Proyecto, Juan Montano Caro.

A su vez, en reciprocidad, Renito recibió la llave simbólica de la Casa de la Décima que en más de una ocasión le ha abierto sus puertas no solamente a él, sino a todos los que sienten y aman la malara en sus más ricos vitrales.

Válida fue la ocasión para dar a conocer el Premio Hispanoamericano José Vasconcelos que se le otorgará en el venidero mes de octubre a Lorenzo Suárez Crespo en su condición de poeta y promotor cultural, distinción que confiere el Frente de Afirmación Hispanista de México, A.C., como expresión de sus objetivos humanísticos dirigidos a incentivar el sentido hispanista que prima en los más de 400 millones de habitantes del habla española para crear una mayor solidez espiritual dentro de nuestro bloque cultural teniendo en cuenta las afinidades de la sangre y de la raza al compartir una herencia común de cultura, costumbres y tradiciones.

La Alondra pinareña.


Adelfa Velázquez,
La Alondra pinareña, así como dúo de humoristas improvisadores formado por Esther Martínez y Osvaldo Díaz dieron toques mágicos al acentuar el gracejo popular.

No faltaron las presentaciones de libros, las danzas, exposiciones de pintura y artesanía, así como las otras artes representativas del imaginario popular. Las horas del ocaso a orillas del Guamá en un domingo que olía a lluvias veraniegas, nuestros lugareños dijeron adiós a ritmos, versos y colorido en su ya familiar Ranchón, pero en el ambiente quedó flotando alguna que otra estrofa mágica dispuesta a volver en la voz de los poetas, y en el entorno, un atractivo Sabor de Cuba.




DEL AUTOR DEL REPORTAJE:




Lorenzo Suárez Crespo (Bahía Honda, Pinar del Río, 1943) Emblemática figura de la poesía en décimas en la provincia. Licenciado en Literatura y Español. Cuenta con una amplia trayectoria de trabajo cultural que le valió en 1999 el Premio Nacional de Cultura Comunitaria, numerosos premios literarios y varios libros publicados, entre los cuales tiene un peso considerable la poesía para niños. De su decimario inédito La brújula del viajero puede ver mediante este enlace el poema ¿Por quién doblan las campanas?, de su decimario La brújula del viajero. También en nuestros archivos, su comentario sobre el decimario Con mi guitarra de invierno, de la doctora Lourdes de la Caridad Gutiérrez Álvarez, publicado por la Editorial Loynaz. Es un destacado colaborador de este sito, al que mantiene informado sobre las actividades de la pinareña Casa de la Décima Celestino García; entre ellas, las tributadas a los fallecidos José Miguel Mederos y Polo Montañez.


SOBRE ESCRITORES DECIMISTAS DE ESTA PROVINCIA, HACIENDO CLIC EN:
PINAR DEL RÍO



Desde México

Ulises Trejo agradece
por el sexto aniversario
 Fandango jarocho.


El sexto aniversario del Rincón de la Décima de Yahoo fue celebrado el sábado 7 de julio, con un fandango en la ciudad de Puebla, en la casa de María de Lourdes Aguirre Beltrán, una de sus más cercanas colaboradoras, como se hizo en 2009 por el tercer cumpleaños
. El coordinador de ese sitio web, el poeta y músico popular Ulises Trejo Amador, ha agradecido a todos su participación, con palabras que aquí reproducimos, e imágenes que el propio Ulises tuvo la gentileza de enviarnos.




Agradecimiento a los asistentes
al sexto aniversario del Rincón

Mil gracias a todos los asistentes al Fandango del Rincón. Seis años consecutivos de vernos a la cara, de reconocernos como gustosos de esta estrofa mágica que es la décima.

Quedaré corto en agradecimiento a todos, especialmente a Carlos Adolfo Rosario que se dejó venir desde Tijuana, a Gloria Trujano y su apreciable familia que nos acompañaron desde la ciudad de Córdova, a Gerardo Méndez Cisneros que llegó desde Morelia, a Roberto Amador Mora que venía rodeando veredas desde Salamanca Guanajuato. A Beltrán el Francés, a la maestra Eleana de Veracruz, a Martínez Atala, Miriam, Rafa, Brenda, Érika Tamayo, Ezekiel, Ysrael, Moisés, Yolanda, Eduardo, Edna, Josué que llegaron desde el Distrito, a Claudia Mendoza y sus entusiastas compañeros de fandango radicados en la ciudad de Puebla, pero sobre todo a Lourdes Aguirre Beltrán y su apreciable familia que nos abrieron gustosos las puertas de su casa.

Gracias a todos, gracias a los conocidos que los reconozco por su nombre y a quienes nos reconocemos solo de vista, gracias los que siempre se nos olvida, a ellos, a quienes nos apoyaron con su entusiasmo y buena vibra pero que por alguna u otra razón no pudieron llegar, y para ello cito el caso de mi hermano Paris que tuvo algunos percances menores en la carretera libre a Puebla, pero que le impidieron llegar.

Gracias también a los ausentes involuntarios y a los voluntarios por permitir que el evento se llevara a cabo en las mejores condiciones. Desde luego a “Los soneros de Huilango”, al grupo “los pescadores” de son jarocho y especialmente a los hermanos del grupo de sones de tierra caliente, sones de arpa grande “El lindero” y sus sones de arpa grande que tocaban con el acompañamiento de una guitarra de son, dos violines, un arpa bien, pero bien grande y un tamboreador. Gracias por compartirnos sus sones tocados al mero y singular estilo de Zicuirán, Churumuco y la Huacana, por revivir la memoria de Don Leandro Corona Bedolla y por compartirnos esa sed de rescate de nuestras tradiciones.

Gracias también a los compañeros de otros países, al Grupo Ala Décima, al compañero Péglez que siempre le da cobertura periodística profesional e internacional a nuestros fandangos.

A mi amigo José Palmar Chirinos, con quien platicaba hace unos días y que me expresó acerca del Rincón:
“ te digo algo, he visitado cientos de lugares de décimas espinelas y el Rincón es el mejor (perdón todos los que DIOS me ha puesto en la internet jajaja)…”
Y enfatizó:
“el Rincón es agua y aceite caliente en una freidora con tapa, todo se altera, se repele, se integra pero nada se sale de el lugar”.
Reconociendo que
“son talentosísimos, virtuosos de la palabra y por ende pensantes, en otros foros todo es dime y diretes y amor casi pornográfico…”

 Desde luego también muchas gracias al periodista Gregorio Martínez Moctezuma de Azteca 21, quien siempre está al pendiente de nuestro foro y que en más de una ocasión nos ha destinado un espacio en su revista, de igual manera a mi amigo Rafael Zúñiga del periódico local “Perfil ciudadano” que también nos da amplia cobertura en su sección cultural.

Noche de Décimas, de rondas de décimas, de presentación, de bendiciones, de saludos de moralejas, de ingenio y de grilla.

Ora si nos llevamos el record, el fandango era hasta ver los rayos del sol y nos seguimos hasta las 11 de la mañana (bueno, al menos a esa hora me regresé a la ciudad de México). Eran las 11 y seguían los sones de arpa cacheteada, con el café negro (el mezcal de gusano se acabó horas antes) y las cemitas ricas de mole ó pipián, la botella de vino de Rafa, las fotos de Claudia y la chica que estaba con que se iba y se iba y se iba… y no se iba.

Muy bueno todo, las décimas, el Son jarocho y la bamba interminable, el buscapiés que aún resuena en el mastoides, las décimas, a voz, el canto y la experiencia de Carlos Adolfo Rosario, los más de 15 decimistas reunidos, el son de arpa grande y su media calandria, la otra media calandria, la polvadera, el ratón y los bailes improvisados de ese son fuerte, áspero, atravesado y caliente, de esa tierra donde dicen que se cuecen los huevos en el pavimento.

El gusto de saludarnos, de volvernos a ver y de sentir que seguramente, empezaremos desde ahorita a organizar el VII aniversario del Rincón de la décima.

A todos mi admiración, respeto y agradecimiento.




 Conjunto de arpa El lindero.






También sobre el sexto aniversario,
entrevista a Ulises en Azteca 21

Memorias de un huapanguero:
El Rincón de la Décima

Por Gregorio Martínez Moctezuma
Coordinador editorial Azteca 21

Ciudad de México. 7 de julio de 2012. El ejercicio de la poesía es un acto que implica un halo de misterio y fascinación debido a su relación con la creación, con el hecho de crear algo de la nada, mejor dicho, como el mago y su bombín, crear algo que antes no existía o no estaba. Misterio porque no sabemos bien a bien qué saldrá del magín y fascinación por lo que, maravillados, surgió casi de la nada. Por supuesto, el producto que el oyente o lector disfruta tiene que ver con la sensibilidad, el bagaje cultural, el conocimiento de su lengua, el dominio de la técnica, la malicia, el decoro... Esto y más es “casi de la nada”.
 
Lo anterior se puede apreciar especialmente cuando se refiere a la décima, esa forma poética venida allende los mares que arraigó en estas tierras americanas y ha dado frutos considerables, los cuales hoy siguen causando asombro y admiración, sobre todo si se trata de décimas improvisadas. Esta forma poética, cultivada por poetas de prestigio y populares, goza de cabal salud en nuestras tierras, como lo demuestra su cultivo y el afecto por parte de cientos de artistas populares, que este fin de semana festejarán en Puebla un aniversario más de El Rincón de la Décima. En seguida, una charla con nuestro amigo y uno de los fundadores e impulsores de ese cónclave virtual, el médico Ulises Trejo Amador.

Ulises, hace cinco años hablamos acerca del primer aniversario de El Rincón de
la Décima, dime, grosso modo, ¿qué ha sucedido en ese lapso?

Antes que nada, quiero darte sinceramente las gracias por ese gran gesto de apoyo e interés al darle seguimiento periodístico a nuestro humilde trabajo. De hace cinco años, cuando tuvimos aquella agradable conversación, a la fecha, quisiera comentar en primer lugar que seguimos aquí, que seguimos vivos en esta bonita aventura de comunicación a través de la décima. Hoy, los decimistas que participamos en
El Rincón de la Décima ya no somos tan virtuales, muchos de nosotros ya nos conocemos y sabemos que somos de carne y hueso.

¿Cuántos nuevos miembros hay –había 106 entonces–, de cuántos países...?

Hoy, somos casi 300 miembros en El Rincón, entre activos y pasivos; es decir, algunos solamente leen y otros tantos escriben décimas y no décimas. Algunas veces ha crecido, pero también algunos han abandonado el grupo. Por diversas razones, unos comentan que por el tiempo y la cantidad de correos (pues se generan alrededor de 200 mensuales), unos anuncian su salida temporal, pero regresan a los seis meses o al año, otros se cansan cuando los temas se inclinan sobre todo a los asuntos de política. En la actualidad, tenemos vasta participación, sobre todo de México, Cuba, Venezuela, España, Estados Unidos, Ecuador, Canarias, Italia, Argentina, Chile, Guatemala, Ecuador y un compañero de Tailandia. Para mí es importante destacar que, además de quienes escribimos en El Rincón, hay muchos participantes pasivos, que sólo nos leen y muchos de ellos son periodistas, comunicadores y, sobre todo, en Cuba, el Grupo “Cuba Ala décima” nos da seguimiento mensual, le dan seguimiento periodístico a nuestro espacio, a cada uno de los aniversarios que se han celebrado, incluso antes y después del evento. De hecho, ellos tomaron prestada la foto que me tomaste aquella vez en Citlaltépec, ¿te acuerdas?

Claro, bonita fiesta huasteca organizada por Arturo Castillo. Ahora háblame de los anteriores aniversarios, del segundo al quinto, ¿cómo los han celebrado?

Desde luego que la organización ha mejorado. Algo muy padre es que a partir del primer aniversario muchos amigos comenzaron a solicitar la rotación y que cada año se celebrara en un lugar distinto. Esto nos habla de un compañerismo, de una identidad que se va forjando y de un compromiso “lírico” que cada quien desea asumir. En el primer aniversario celebramos con un fandango jarocho y unos intermedios con canciones rancheras que unos allegados se animaron a tocar. Recuerdo muy bien que un vecino conocido como “El Clavo” se aventó esa canción llamada “Caminito de Contreras”, que define muy bien la necesidad que tenemos la gente del Distrito de decir “aquí estamos y de aquí somos”. Pues bien, para el segundo aniversario ya tuvimos participación de son huasteco, además del jarocho. El grupo Estampa Huasteca hizo un perfecto contraste frente al contingente jarocho al compartir su versada improvisada en sextillas y los espacios de improvisación en décima que se alternaron. El grueso de los asistentes éramos más afines al son de sotavento y recuerdo muy bien un verso que nos echaron en el zapateado, decía algo así como: “Saben ganar por montón, y éstas serán las verdades, jarochos un batallón, huastecos tres generales”. El tercer aniversario lo celebramos en Puebla, en casa de Lourdes Aguirre Beltrán. De ese fandango hicimos un testimonio en formato DVD, por cierto, ¿ya lo tienes?

No.

Bueno, después te consigo uno. El cuarto aniversario nuevamente fue en Tláhuac, en
la Colonia del Mar, con la participación ya de Tierra Caliente y sus sones de arpa grande. Buenísima fue una valona que improvisó Ana Zarina al calor del jolgorio, de los bailadores y de la medianoche. Al inicio de este fandango nos dimos la oportunidad de presentar el primer libro colectivo realizado por quienes participamos en El Rincón: “El libro del Bycentenario”, y amenizado por las canciones revolucionarias de Brenda Kurczynsky. El quinto aniversario también fue en Tláhuac, tuvo una participación nuevamente bastante concurrida, primero amenizada por un foro de música de trova, dejando libre la guitarra para el que quisiera echarse un palomazo. También tuvimos bel canto, música de ópera interpretada por un trío de extraordinarios cantantes: Fabiola Kurcyn, Brenda Kurcyn y Rafael Méndez. Desde el tercer aniversario decidimos elaborar un breve programa, bastante holgado, pero con la intención de integrar diversos géneros culturales que tengan que ver con la décima.

Aparte de lo ya mencionado, ¿han elaborado algún libro o antología?

Sí, en estos años hemos tenido la oportunidad de elaborar un par de libros: “Un rosario con perlitas de la luna”, entre Lourdes Aguirre y un servidor, que es un libro derivado de una serie de temas abordados a través de la décima, donde establecimos una conversación y que finalmente decidimos publicar. Y el que ya te dije, “El libro del Bycentenario. Décimas, centésimas y bicentésimas”, para conmemorar los 200 años de independencia y los 100 años de revolución de nuestro país, elaborado y sacado a la luz justamente en el año 2010 y donde participaron 16 poetas de El Rincón de la décima. Otro libro fue “El metro en décimas”, libro destinado a salir en capítulos, según la línea desarrollada mediante esta estrofa. Por ahora llevamos impresa la línea 8. Finalmente, elaboramos como te lo comenté, el DVD “Tercer aniversario de El Rincón de
la Décima”, que pretende ser justamente un testimonio del trabajo que hemos desarrollado en este tiempo y de la madurez que ha adquirido cada versador. Por otra parte, derivado del quehacer decimístico en El Rincón, el poeta cubano Ramón Espino compiló la antología “No se infartó la palabra”, que recupera estrofas de infinidad de diálogos poéticos desarrollados en nuestro espacio.

Al parecer, les ha funcionado el formato de participación que, en esencia, sigue siendo el mismo de ese primer aniversario, ¿no?

Hasta el momento sí, sin embargo, vamos cayendo en la “obsolescencia” frente al crecimiento y desarrollo de otros medios electrónicos, como Facebook, que requieren una participación más dinámica y en algunos casos incluso de mayores y mejores recursos tecnológicos para los cuales aún no nos encontramos preparados completamente. Los compañeros de Cuba, por ejemplo, con bastantes limitaciones nos dan seguimiento a través de Yahoo! y para muchos les es imposible otro medio. No obstante, ya contamos también con la página “El Rincón de
la Décima” en Facebook. Asimismo, se creó un foro alterno en Yahoo! denominado “Diálogos poéticos” para fortalecer el seguimiento a los versos de grandes poetas y su desarrollo por parte de muchos decimistas en todo el mundo, así como para dar espacio a la difusión propiamente de aspectos técnicos y reglas consensuadas para la elaboración de décimas.

Como miembro fundador del grupo, desde tu punto de vista, ¿qué aspectos definirían al grupo o qué lo caracteriza?

La práctica de la comunicación a través de la décima, por una parte, y el de la libre expresión, por la otra. Aquí tenemos de todo, de todas las corrientes de pensamiento político, ideológico y artístico. Hay (como lo decía Pancho Camacho) los técnicos y los rudos, los académicos y los autodidactas, los cuerdos y los locos, los chavos y los viejos, los auditivos y los visuales, los críticos y los criticones, los soeces y los pulcros... Hay de todo y esa tolerancia y ese incluyentismo creo que nos ha servido a todos.

¿Qué retos o proyectos tienen por delante o sólo basta con la elaboración de décimas...?

A mí me hubiera gustado, a estas alturas, contar con un mayor compromiso de muchos integrantes y crear un espacio más formal de participación en torno al desarrollo de este arte. Que se formaran talleres de creación de décimas, que hubiera más iniciativas de publicación (de revistas y libros), que contáramos con el apoyo de otros espacios de participación para la difusión y creación de la décima e incluso que los compañeros de El Rincón constituyéramos un comité o un grupo de poetas creadores de décima para tener presencia formal en varios niveles, pero creo que estos planteamientos aún deben madurar de manera individual y colectiva.

Compartiste décimas la vez anterior que platicamos, ¿quieres hacerlo ahora?

He dicho versos al viento,
para alguna invitación,
más también de corazón,
digo de agradecimiento.
A quien nos dio seguimiento
en el ciberterritorio,
es para mí obligatorio,
bendecir al periodista
y por tu atenta entrevista,
te doy las gracias, Gregorio.

Gracias, Ulises.

Ahí va esta décima de esdrújulas:

Quizá por vivir en México,
es que adoro las esdrújulas,
para mí son como brújulas
que van trazando mi léxico.
Estimulante refléxico
para el deleite timpánico,
pero resulta titánico
este malabar artístico
que en el jornal decimístico
a muchos les causa pánico.

Y una más referente a estos seis años que llevamos en El Rincón:

Hoy cumplimos ya seis años
de este recinto de voz,
y le doy gracias a Dios
por la sexta de peldaños.
De primero un poco huraños,
compartimos el ingenio
luego hicimos un convenio,
predicando las malaras
y antes que el gallo cantara,
ya cumplimos un sexenio,

y conformada esta escuela
ya cumplimos un sexenio.

Gracias, Ulises, ¿deseas agregar algo más?

Claro que sí, invitarte e invitar a todos al fandango para celebrar el sexto aniversario de El Rincón de
la Décima, que se realizará en la ciudad de Puebla el próximo 7 de julio a partir de las siete de la noche. Además, comentar orgullosamente que hemos sido ejemplo en muchos países para establecer este modo electrónico y real de comunicación entre decimistas. En Cuba, por ejemplo, siempre nos citan y le dan seguimiento a nuestro trabajo; en Puerto Rico surgió recientemente el foro “El Rincón del Repentista” y en México también han surgido grupos virtuales donde recuperan esta estrofa y la manera de comunicarnos a través de la décima. ¡Bienvenidos todos ellos!






INFORMACIONES ANTERIORES:







Acerca de una de las tradiciones más interesantes de este hermano país, vea Ulises Trejo Amador bromea con la muerte, y con el mismo tema, Acrósticos necrófilos y Calaveras, ambos de la poetisa María de Lourdes Aguirre Beltrán.



MÁS SOBRE LOS HERMANOS DECIMISTAS
DEL RINCÓN PUBLICADOS EN NUESTRO SITIO:


MEDIANTE LOS SIGUIENTES ENLACES:
SOBRE EL CUARTO ANIVERSARIO, EN 2010

martes, 10 de julio de 2012



Resumen de voluntades

Asi puede calificarse la edición 45 de la Jornada Cucalambeana, finalizada días atrás en Las Tunas. La voluntad de creadores y organizadores pudo más que las dificultades objetivas y subjetivas

Foto: Yaciel Peña de la Peña


La edición 45 de la Jornada Cucalambeana, finalizada el primero de julio en Las Tunas, demostró, entre otras cosas, cuánto puede la voluntad de creadores y organizadores para vencer dificultades objetivas y subjetivas. La Jornada confirmó su carácter de fiesta mayor de ese gran complejo que conforman la cultura campesina —tradiciones que van desde su música y sus danzas y su confluencia en las canturías, hasta su cocina, sus juegos, sus herramientas de labor agrícola— más la décima en todas sus variantes, desde el mágico repentismo (poesía oral improvisada) hasta la que es concebida para ser leída, la décima escrita, no necesariamente de índole rural. Rindió tributo a los más emblemáticos escritores decimistas de los siglos XIX y XX, respectivamente: Juan Cristóbal Nápoles Fajardo, el Cucalambé y Jesús Orta Ruiz, el Indio Naborí, en los aniversarios 183 y 90 de sus natalicios, junto a los cumpleaños
50 del programa televisivo Palmas y Cañas y 45 del Conjunto Original Cucalambé, y recuperó elementos distintivos en la historia de las Jornadas Cucalambeanas a lo largo de su programa. Entre esos rescates, dentro del conjunto de certámenes previstos, figuró el Premio Cucalambé, tras la interrupción en el 2011 de ese certamen literario con varias décadas de vida, y que es el más importante, en toda Hispanoamérica, de esa modalidad de la poesía escrita.

Ofrecemos un resumen informativo de este resumen de voluntades:


En Cuba Ala Décima:



En Trabajadores:

La cultura campesina toma la ciudad (Por Pedro Péglez y Jorge Pérez Cruz).- Las Tunas. La LXV edición de la Jornada Cucalambeana comenzó aquí el miércoles en el museo provincial Mayor General Vicente García González con un panel teórico bajo el título “Para ver más allá de las estrellas”, dedicado al Indio Naborí en el aniversario 90 de su nacimiento, a quien se rinde tributo en esta celebración. De esa manera la cultura campesina recrea múltiples espacios citadinos, con propuestas tradicionales como la reedición de la cabalgata realizada en 1966 desde la Plaza Calé hasta El Cornito –cuna del poeta Juan Cristóbal Nápoles Fajardo, El Cucalambé–, en la cual participaron entonces numerosos intelectuales, entre ellos el propio Naborí.

El legado africano, la décima mural y el humor (Por Pedro Péglez y Jorge Pérez Cruz).- Las Tunas. En el Museo Provincial Mayor General Vicente García, situado en el centro histórico de la ciudad capital de esta provincia del oriente cubano, sesionó el espacio de reflexión “La diversidad cultural en el legado africano y sus portadores en los campos de Cuba”.

Concluyó Jornada Cucalambeana (Por Pedro Péglez y Jorge Pérez Cruz).- Las Tunas. Con un gran guateque de clausura finalizó la edición 45 de la Jornada Cucalambeana (…) En los certámenes de la décima escrita se alzaron triunfadores dos poetas de Guisa, provincia de Granma: Jorge Adrián Betancourt ganó el de glosas con su texto “Paráfrasis del convicto”, mientras el libro “Nosotros los cobardes”, de ese mismo escritor en coautoría con Alexánder Aguilar, conquistó el Premio Cucalambé, convocatoria literaria rescatada en esta Jornada, en el cual obtuvieron menciones Luis Martínez Carvajal, de Ciego de Ávila; Miguel Mariano Piñero, de Las Tunas; y Caridad González Sánchez, de Villa Clara. (…) El concurso nacional de repentismo Justo Vega fue ganado por Cindy Manuel Torres, de Pinar del Río, seguido por José Antonio Morales, de Matanzas, y Frank Pereira, de Mayabeque.


En Juventud Rebelde:

Indio Naborí, un poeta popular (Por Yelanys Hernández Fusté).- Los versos improvisados de Tomasita Quiala y Jorge Sosa dibujaron con palabras, este miércoles, esa maestría poética anclada en la obra de Jesús Orta Ruiz. Sus décimas colorearon aquí esa universalidad con que el Indio Naborí reflejaba la cubanía de nuestros campos.


En Granma:

Jornada Cucalambeana: Defenderla décima a décima (Por Pastor Batista Valdés).- Las Tunas. Después de cinco días, intensos para los organizadores, insuficientes para los adictos a la cultura campesina, siempre oportunos para quienes ven con el iris del optimismo la llama que prendió El Cucalambé (y no las cenizas del tiempo y de los hombres), volvió a coronar su propia frente la fiesta cumbre y más abarcadora de todos los campesinos cubanos. Para criticar desaciertos —perceptibles o no— tal vez a repentistas, improvisadores y público, al verso octosilábico o al galope sin riendas ni medida de cualquier tecla, les quede pequeña otra jornada de opinión, aún con las más sanas intenciones. Lo más sensato y justo, en cambio, tal vez sea poner a un "céntrico lado" de los organizadores todo lo que subjetivamente puede redimirse en junio del 2013 —ojalá siempre así ocurra— y acuñar realidades que ningún dedo puede ignorar. Pienso en la voluntad que puso a prueba el territorio para transfundir vida a una décima que late y bombea más allá de El Cornito, de Las Tunas... y de Cuba.








Estos Césares,
para nada
perdidos


Presentación del poemario
Los Césares perdidos Premio Iberoamericano Cucalambé 2008, de Odalys Leyva Rosabal—, en el Catauro de la décima de la XLV Jornada Cucalambeana. Las Tunas, 30 de junio de 2012.


Dice Frank Padrón que es curioso que el lector común acepte como lo más natural del mundo que el narrador asuma en su obra los más disímiles personajes, y sin embargo se sorprenda cuando el poeta, en sus textos, hable desde voces que no son la propia. Es como si entendiera un pecado de lesa literatura que el escritor de poesía delegara su opción de sujeto lírico en otros seres, a veces bien distintos entre sí, a veces bien distantes del autor en términos temporales, geográficos e incluso espirituales.

Es el juego de máscaras, proceder escritural que aprovecha para la poesía ganancias de la dramaturgia, más que de la narrativa, y que ha alcanzado entre nosotros últimamente enjundia y apetencia, no sin arrostrar los riesgos de la poca costumbre y los que el propio procedimiento encierra.

En esa línea de asunción de tales desafíos se inscribe Los Césares perdidos, poemario en décimas con el cual alcanzó el Premio Iberoamericano Cucalambé 2008 la escritora Odalys Leyva Rosabal, nacida en Jobabo, Las Tunas, en 1969, y residente desde niña en Guáimaro, Camagüey, desde donde dirige el grupo iberoamericano de poetisas Décima al filo.

El telón de fondo escogido es la antigua Roma, como dije en el prólogo “aquella Roma clásica de república y esclavos y senado y dictadores, con cuya arquitectura grave y aristocrática se diría que ha sabido Odalys contaminar la armazón léxico-tropológica de su conjunto poético”.

Aquí Odalys se trasviste y caracteriza, bien como Cleopatra —a la cual acude una y otra vez, en cierto modo como hilo conductor de la mascarada—, bien como cualquiera de las otras figuras, femeninas y masculinas, heterosexuales u homosexuales, que protagonizaron en verdad la Roma de la época.

Se sumerge uno en estas páginas y se antoja uno allí, ganado por las habilidades de la autora para envolvernos en su juego de evocaciones, para el cual aprovecha ecos de la oratoria, el teatro y el coro polifónico, tan acertados por distintivos para tales propósitos.

Pero como también dije en el introito del volumen, no es este entrampamiento el fin último de esta obra poética, sino antes bien el aprovechamiento de tales evocaciones para echar luz —oh vocación liberadora de la dominante cultural de la posmodernidad— sobre males contemporáneos.

Acaso por eso, de cuando en cuando, nos trae y retrotrae al mundo actual con referencias ajenas al contexto en que nos sabe atrapados, echando mano a rupturas del hijo dramatúrgico, que se perciben de algún modo emparentados con los procederes del extrañamiento brechtiano.

De la magnitud con que logra Odalys tales intenciones, por supuesto dirá el lector la última palabra. Pero mientras tanto, vaya desde aquí nuestro beso fraterno hasta Odalys, que en Guáimaro se recupera de una complicada intervención quirúrgica efectuada en La Habana, con el deseo expreso de restablecerse prontamente para continuar aportando espacios, desde el Grupo Décima al filo, a la promoción de nuestro universo de la poesía escrita en décimas.

Desde este humilde estrado del presentador, sugerimos a quien adquiera y lea estos Césares, para nada perdidos, trasladar a la autora sus apreciaciones, y también los cariñosos deseos de su recuperación completa.

Muchas gracias.