domingo, 25 de noviembre de 2012



Desde Pinar del Río

Coro por Aniano Coro


Una colaboración de Lorenzo Suárez Crespo, merecida y recientemente laureado con el Premio José Vasconcelos, que otorga el mexicano Frente de Afirmación Hispanista, A.C.



Una pertinaz llovizna invernal que se extendió durante toda la tarde puso a prueba una vez más la fidelidad de los lugareños al llamado de la Viajera Peninsular, esta vez con la impronta de que el viejo Ranchón es solo un recuerdo hasta su nueva aparición bajo el auspicio de una reconstrucción que apenas comienza.

El triángulo que ofrecen las calles Séptima final y Callejón del puente se ha convertido a partir de este sábado en la atalaya de los improvisadores y solistas que amenizan los guateques sabatinos.

Allí en el portal de la casa de dos de nuestros poetas se improvisa el escenario para el equipo de audio y los micrófonos, espacio de solistas, poetas y tocadores.

Sin perder la ternura y el sentido de pertenencia que los caracteriza, los miembros de la comunidad y los asiduos visitantes disfrutaron de los espacios habituales que proporciona cada encuentro: música, versos y en esta ocasión el homenaje.

Después del tema musical que identifica el proyecto cultural a  orillas del Guamá, los animadores Juan Montano y Oscar Santana llamaron a la ronda de los poetas, esta vez con un nombre en los labios: Aniano Coro, poeta viñalero cuya existencia, rica en el legado versal y apostolado humano, cubrió la ruta existencial entre el 17 de noviembre de 1907 y el 13 de diciembre de 1979. Poeta popular que ha sido reconocido por toda la provincia como uno de sus más queridos trovadores, tanto por su condición humana como por la impronta de una décima rica en los matices provincianos como en el gracejo popular, pues sus temas más trascendentes se nutren de humorismo y cordialidad. Aniano fue un poeta que como Celestino García, hablaba en versos y su riposta a cada pregunta se ungía de octosílabos rápidos y emotivos.
No faltaron versos laudatorios como estos de Yoel Márquez:

Aniano Coro, qué coro
de admiradores tuviste
y por lo que ayer dijiste
tu perspicacia valoro.
La picardía fue el oro
de tu existencia guajira
y fue tan amplia tu lira
que aunque ausente, ya sin duda,
el recuerdo te saluda
y el olvido ni te mira.

O acaso en la cuerda repentista y gratificante de José Lorenzo Delgado:

Aniano, lírico y mago
de la emoción y la risa,
tu voz no deja la brisa
ni el recuerdo como pago.
Aniano, siempre que indago
a las palmas, al bohío,
nos llegas en tu albedrío
como el más supremo ejemplo
de los que tienen su templo
de amor en Pinar del Río.

Los últimos años del poeta transcurrieron en el Entronque de Herradura y desde esa zona supo proyectar su imagen y  bagaje poético en las alas de un repentismo muy aleccionador, al resto del occidente y de la Patria.

A pesar de lo sinuoso de la calle por  la irregularidad del poco asfalto que le queda no evitó que, como siempre, los lugareños disfrutaran de los bailables.
Y así, con un coro por Aniano Coro, la voz de los poetas pudo viajar entre cuerdas más allá de lo oscuro de la noche hasta el receptivo cristal ondulante de las aguas del Guamá.

Para nuestros amigos, esta selección de malaras laudatorias por Aniano Coro Cordero concebidas por paisanos del Entronque de Herradura después de su muerte y que forman parte de nuestros archivos en la Casa de la Décima Celestino García.


José Agustín Coro (hermano)

Lo que recuerdo de Aniano
a nadie lo pregunté,
siempre lo recordaré
como amigo, como hermano,
como poeta y cubano
y de la misma manera
que alguno se le ocurriera
ir a cantar a la esquina,
en el parque o la cantina
o en otro lugar cualquiera.


Delio Díaz

Aniano Coro Cordero,
hijo de Pinar del río,
guajiro como el bohío,
fue poeta y guitarrero.
Le goteó como el alero
perlas a la poesía
y le dio tanta alegría
con chistes a mi deseo
que voy al entronque y creo
que está vivo todavía.


Ángel Clausell Rodríguez

Si hablan mal de Aniano Coro
están mirando al vacío,
él fue un gran amigo mío
al brindarme su tesoro.
Lo aplaudo y lo condecoro
con boina en vez de sombrero;
con su voz cual de jilguero
ya quedó para la historia,
pues hoy reposa en la gloria
con Benito el Viñalero.


Tomás Rodríguez

Aniano Coro fue fragua
humilde del veguerío,
fue la corriente del río
y el arique de la yagua.
Aniano, flor de majagua,
flor que liba el colibrí;
precisamente es así
si se dice Aniano Coro:
garganta de tocororo
con versos de Naborí.


Pedro Prieto

En paz, que descanse en gloria
el poeta Aniano Coro,
su rabel de plata y de oro
se quedó escrito en su historia.
Hoy viene hasta mi memoria
alguna recordación;
me dijo en una ocasión:
pondrás sobre mi ataúd
una guitarra, un laúd
y una botella de ron.


Lauro Benítez

Desde un niño hasta un anciano
en reuniones jocosas,
hace mito de las cosas
que tú eternizaste, Aniano.
Albañil, vagón en mano
fraguaste la mezcla dura
y como el pueblo murmura
aún tu existencia tremenda,
siempre serás la leyenda
del Entronque de Herradura.


DEL AUTOR:
Lorenzo Suárez Crespo (Bahía Honda, Pinar del Río, 1943) Emblemática figura de la poesía en décimas en la provincia. Licenciado en Literatura y Español. Cuenta con una amplia trayectoria de trabajo cultural que le valió en 1999 el Premio Nacional de Cultura Comunitaria, numerosos premios literarios y varios libros publicados, entre los cuales tiene un peso considerable la poesía para niños. De su decimario inédito La brújula del viajero puede ver mediante este enlace el poema ¿Por quién doblan las campanas?, de su decimario La brújula del viajero. También en nuestros archivos, su comentario sobre el decimario Con mi guitarra de invierno, de la doctora Lourdes de la Caridad Gutiérrez Álvarez, publicado por la Editorial Loynaz. Es un destacado colaborador de este sito, al que mantiene informado sobre las actividades de la pinareña Casa de la Décima Celestino García; entre ellas, las tributadas a los fallecidos José Miguel Mederos y Polo Montañez.

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