martes, 31 de octubre de 2017

Jornada de la Cultura en Las Tunas


Finalizó con numerosos encuentros


El Día de la Cultura Nacional Cubana, se celebra cada 20 de octubre, considerándose un suceso que marca categóricamente el nacimiento de una nación rebelde y de su identidad.

La fecha fue instaurada en evocación de uno de los sucesos más distinguidos que atesora nuestra historia: la entonación por vez primera del himno nacional cubano, La Bayamesa, como la llamó el pueblo en el momento en que tropas mambisas dirigidas por Carlos Manuel de Céspedes liberaron a la ciudad de Bayamo. Perucho Figueredo fue el autor de esos apasionados versos, escribió la letra sobre la montura de su caballo.

Los festejos toman prácticamente el mes de octubre en su totalidad. La Jornada de la Cultura Cubana en Las Tunas, tuvo el impulso de los miembros de la Filial de escritores de la Uneac, fueron múltiples las actividades y acciones organizadas, dentro de ellas un recital poético a cargo de Marina Lourdes Jacobo, en la Fundación Nicolás Guillén y un taller de reflexión por Lucy Araujo, la actividad Sementera en el municipio Calixto García fue realizada por José Alberto Velásquez, El Café de Artistas que se efectúa en el patio de la Uneac, lo conduce Lesbia de la Fe y fue dedicado al poeta Adalberto Echavarría, así como un recital de poesía por el mismo autor en La Casa del Soneto en Omaja; resultaron significativas varias lecturas de otros autores en centros de trabajo e instituciones culturales; participaron además Carlos Esquivel Guerra, Xiomara Maura Rodríguez, Víctor Marrero, Ana Rosa Díaz, Maritza Batista, Andrés Casanova, Lucy Maestre, Junior Fernández; Juan José Rodríguez y Odalys Leyva entre otros.

Fue notable el panel teórico: Figuras relevantes de la literatura tunera, a cargo de los escritores María Liliana Celorrio, Antonio Gutiérrez y Carlos Tamayo Rodríguez.

Los tres hicieron un acercamiento a la literatura tunera desde sus orígenes, Carlos Tamayo mostró documentos originales que poseía sobre poetas del siglo XIX, partidas de nacimiento, fotos de alto valor histórico y mostró a los presentes el camino por donde se fue acercando desde su juventud a los archivos históricos y bibliotecas, resaltó además el poeta e investigador, presidente de la Uneac, albacea de documentos que fueron entregados por los familiares de figuras ilustres de Las Tunas.

Antonio Gutierrez de igual manera partió de un estudio desde el siglo XIX hasta la actualidad, haciendo referencia incluso a poetisas que fueron quizá el origen de la poesía escrita por mujeres en Las Tunas, su presentación tuvo una base sólida sobre la literatura nuestra, tema que ha abordado en diversos libros.

La alocución de María Liliana Celorrio estuvo dirigida a la narrativa y específicamente a los investigadores y estudiosos que han publicado textos de ensayos y crónicas en Las Tunas o dirigidas a Las Tunas, con un respaldo de ejemplos que resultó ameno a los presentes, ofreció datos desde una manera formidable, expresó al comenzar:

Las Tunas es una tierra con tradición literaria, muchas imprentas, fundaciones de revistas, periódicos, semanarios como El Hormigo, El Eco de Tunas, El Novel, El Vocalista, Vegas y bromas, La Estrella, El Faro, La Alborada, entre otros. Quiero puntualizar como una curiosidad y una cosa maravillosa que tiene esta provincia, es que tenemos el privilegio de que el director de la revista Chaparra Agrícola fuera nada más y nada menos que Mario Calvino, padre del novelista Italo Calvino, que pasó tiempo de su infancia en su casa de madera en San Manuel, donde logramos colocar una tarja para preservarla de huracanes y desidia. Es decir que con nosotros vivió Mario Calvino y su hijo pasó tiempo y quién sabe si esa infancia de Italo tiene estas cosas de Las Tunas, de esa localidad de San Manuel y de Chaparra, tierra donde los deportistas escriben libros, porque por ejemplo me encontré un libro de Lázaro Bruzón, que escribió Cuarenta partidas memorables, muy bien escrito y donde los héroes escriben teatro, poesía, testimonios extraordinarios y cuentos como Efigenio Ameijeiras, maestro en la creación de personajes en situaciones límites (....) (Celorrio 2017).

Luego puntualizó sobre narradores e investigadores con libros publicados en esos géneros en Las Tunas.

De manera que en el Día de la Cultura, la literatura no pasó por alto momentos importantes de esta, y se dirigió las comunidades, teniendo claro que la cultura no existe solamente como elemento de la naturaleza humana, es fuente de valores, normas y conductas. No solamente se concibe como una creación artística y literaria, sino como todo lo que tiene que ver con el hombre y su sensibilidad; es también una de las formas en las que se enuncia el progreso y desarrollo social, la interacción con el otro.

En el desarrollo cultural se manifiesta la multiplicidad y colectividad, la cultura se puede estimular, avivar, impulsar. La creatividad debe de ser libre en su gravidez para que surja sin restricciones, para que irrumpa en toda su capacidad creadora, con autenticidad como expresión original.

En el libro El Caribe en su discurso literario, de Margarita Mateo Palmer y Luis Álvarez Álvarez, se trata la dinámica de las socializaciones.

La cultura, al garantizar la socialización general (o, al menos, sociogrupal) de series sígnicas, permite a cada individuo perteneciente a esta (o capacitado para desenvolverse en ella, aunque no sea la propia) el prever el comportamiento de otros individuos, lo cual significa que se puede no solo comprender sino pronosticar ciertas reacciones (sobre todo a nivel comunicativo) de otros seres humanos en el ámbito de la intercomunicación social. Asimismo, la cultura tiene un fuerte componente axiológico, y consolidada y codifica “lo que está socialmente bien” en un tiempo y espacio dados, y lo diferencia de “lo que está socialmente mal”, que, por lo demás, resulta consolidado y codificado. Por supuesto que el lenguaje, como han coincidido todos los lingüistas y culturólogos, es uno de los primeros resultados de la formación de una cultura, pues esta se estructura, afianza y desarrolla en la medida en que dispone de un lenguaje como vehículo de interpretación cultural. […] . (Mateo y Álvarez; 2005: 21)

Por ello los escritores tuneros leyeron sus textos en diversos sitios y de esa manera la palabra, la belleza, el canto que enaltece, tocó la sensibilidad de los amantes del arte, se unieron a músicos y pintores para realizar una Jornada de la Cultura memorable, un homenaje a todos los que a través del tiempo han ofrecido su lucidez en la música, la danza, el teatro, el ballet, el cine, la pintura, y la literatura, pues los cubanos somos seres humildes con notable apasionamiento. Seres culturales que cuidan ese patrimonio que ha pasado a través del tiempo hasta construir una historia, una cultura que ovaciona.










No hay comentarios: